jueves, 12 de junio de 2008

ARTES DE CALLE


Todavía está caliente en nuestras retinas el reciente TAC (Teatro y Artes de Calle de Valladolid) y de entre las muchas reflexiones que siempre suscitan este tipo de eventos hay una que, este año y al menos desde mi percepción, más se ha sentido: ¿Teatro de calle o teatro en la calle?

Primero me gustaría dejar clara mi posición al respecto.

Para mí, teatro de calle es aquel teatro planteado y diseñado para su exhibición exclusiva en la calle. Un teatro que por estructura y planteamiento sería imposible de mostrar en salas.

Teatro en la calle sería todo aquel que para mostrarse utiliza recursos y planteamientos del teatro de sala o de interior. Que, de forma evidente, lo podríamos ver tanto en espacios abiertos como en teatros.

Así de simple.

Otra cosa, no tan simple, sería definir que estructuras y planteamientos son los mejores y más adecuados para la calle o, lo que sería más complejo todavía (y que más afecta al "ser o no ser" del TAC), que propuestas de calle merecen entrar dentro del calificativo de "artes de calle".

El concepto "Arte" es de una gran ambigüedad y está sujeto, como pocos, a los criterios (o incluso fobias y caprichos) subjetivos de cada cual. Por esto considero que un festival de la importancia y magnitud que tiene el TAC debe basarse en criterios artísticos lo suficientemente (no confundir con infinitamente) flexibles y amplios como para que se vean reflejadas el mayor número posible de opiniones subjetivas sobre lo que es arte de calle. Con esto no pretendo justificar "el todo vale" sino que todos, empezando por los responsables de la programación, pasando por los profesionales y terminando por el público, debemos respetar y entender que existen propuestas teatrales que pueden no ajustarse a nuestro criterio subjetivo de lo que es arte pero que, por otro lado, pueden conmover y emocionar a otros cuyos criterios son tan válidos como distintos de los nuestros.

CARLOS TAPIA

8 comentarios:

Mercedes dijo...

Buen comentario. Solo quisiera aportar que en todo este "enredo" sobre "de calle" o "en la calle", también cabe la utilización del espacio urbano de una forma distinta a la habitual, algo no siempre ligado al arte o al teatro. A lo mejor hay que ser un poco menos elitistas, ponernos un poco menos estupendos y pensar que aquellos gitanos con su cabra y su música, que no hacían arte, ni teatro, ni circo, también nos hacían mirar la ciudad con otros ojos sorprendiendo nuestra cotidianeidad.

Anónimo dijo...

y todo esto lo dice una compañia de teatro y socios de la misma, que sus espectaculos de calle "son animaciones y bariettes" que el barroco roll, spanish o las dracks son eso unas puras animaciones con dinero por delante... con una buena estetica pero sin ningun tipo de dirección ni dramaturgia. pero eso si con actuaciones y actuaciones, por que lo que los aytos lo que quieren ese eso colorido y ruido sin mas pretensión que hacer reir al publico. osea que vuestro rollo moralino y filosofico del TEATRO DE CALLE os lo podias aplicar, TEATRO DEL QUE TE MUEVA LAS ENTRAÑAS....

Anónimo dijo...

Creo que deberías leer mejor los comentarios que preceden al tuyo. En ninguno de ellos se afirma que lo que Azar Teatro hace en la calle sea "Arte", simplemente se menciona la subjetividad del término. No hay ningún rollo "moralino" ni "filosófico". Es más, se hace referencia a un espacio no solo para el arte, sino también para lo popular, como la animación, los malabares, los sowman y el circo. Por supuesto para gustos están los colores.

Susana dijo...

Bueno.
Yo sólo pensaba darme una vuelta por aquí al ver que el blog ya estaba activo y dejar un comentario de bienvenida, pero por lo que veo hemos empezado fuerte, ¿no?
Sobre teatro de calle o en la calle, no tengo nada que añadir. Creo que ha quedado claro. Al menos para mí.
Sobre el "Arte", llevo tiempo intentando crearme una definición, algo que me sirva a mí, para decidir si lo que veo es arte o no. Sigo intentándolo. Lo único que tengo claro es que "subjetivo" y "que provoque un sentimiento" serían parte de esa definición.
Algo, esto último, que una compañía de teatro y socios de la misma consiguen con cada uno de sus espectáculos (de calle, en la calle, de sala o en la sala).

Anónimo dijo...

TEATRO DEL QUE TE MUEVA LAS ENTRAÑAS....

¿Qué entrañas? ¿Las tuyas, las mías o las de un jubilado de la Rondilla?

Lo de mover las entrañas está sujeto a la misma ambigüedad y subjetividad que el concepto de lo que es arte.
Incluso más. Porque el concepto de arte está más ligado a abstracciones intelectuales o de los sentidos, mientras que las entrañas se mueven por impulsos viscerales normalmente ajenos a nuestra voluntad.
Con el movimiento de las entrañas no me parece que se pueda medir lo que es arte. Las entrañas se pueden mover en direcciones muy diferentes ante un mismo hecho. Las corridas de toros son consideradas "arte" por mucha gente en nuestro país. No nos puede caber duda de que una buena "faena" mueve las entrañas de estas personas. Como tampoco nos cabe duda de que esa misma "faena" mueve también las entrañas a quienes consideran las corridas de toros una barbarie, eso sí, las mueve en una dirección muy diferente a las otras.

En el tema del teatro pasa otro tanto. Ante un mismo hecho teatral hay gente que queda transida, con las entrañas en las manos, mientras a otras las despiertan los aplausos.

Anónimo dijo...

Hace tiempo, en este país, los actores eran conocidos bajo el nombre de "cómicos". La palabra cómico (actor que representa papeles jocosos, que divierte y hace reír) deriva de Comedia (Obra dramática,cinematográfica o teatral en cuya acción predominan los aspectos placenteros, festivos o humorísticos y cuyo desenlace suele ser féliz).
Desde aquí defiendo a todos los actores cómicos cuya pretensión es hacer reír al espectador. Obtener una sonrisa del público es una recompensa enorme para cualquier actor. ¿Acaso no es lícito actuar con la pretensión de hacer reír al público?. ¿Se nos olvida que grandes actores como Charles Chaplin, los Hermanos Marx o
Cary Grant realizaron números cómicos en espectáculos de "varietes"? por no citar otros nombres de actores españoles que recorrían y recorren nuestros teatros y plazas con la única pretensión de hacer reír al público (y de comer, porque los actores también tenemos estómago y entrañas)Escribo esto para defender la risa, el drama, las pretensiones o la falta de ellas en general. Escribo para defender el nombre de tantos cómicos que nos hacen reír. Viva la risa. Que las sonrisas se despierten todos los días en el teatro. Que los cómicos nos hagan sentir ya sea haciendo tragedias como "Hamlet" o comedias como "El Apartamento" (aunque parezca osado comparar a Shakespeare con Billy Wilder). Ánimo a todos los actores y técnicos, que "animan", celebran y trabajan en la "fiesta del teatro".

Anónimo dijo...

Acaba de terminar el Festival de Salamanca, que ha ido a seguido del Tac. Como público de estas dos citas teatrales y de danza, quiero decir que una de las cosas que más valoro es su heterogeneidad, el que en ambas propuestas quepan lo más vanguardista, conceptual y experimental y lo más irónico, carnavalesco y popular. Ese me parece el mejor ejemplo de cultura viva, esa es la mezcla de la cual todos nos alimentamos (culturalmente hablando). A mi, lo que de verdad me "mueve las entrañas" al final, es la suma de todos esos momentos mágicos que como espectador he vivido. Cada espectáculo deja su huella en el espectador, una veces sacude su conciencia, otras lo distancia de la realidad, otras lo conmueve y otras no pasa nada. Pero un día, una charanga o unas majorettes fuera de nuestro personal contexto nos hace vibrar de forma especial, nos remueve y despierta nuestro yo dormido, nuestro verdadero amigo, ese al que pocas veces visitamos y que nos reconcilia con el mundo. A mi, entre drama y drama, ¡que me animen!.

Anónimo dijo...

¡Que nivel! Un servidor se da una vuelta por aquí y queda acomplejado. Teatro de Calle, Teatro en la Calle...., a mi me parece igual de valorable una u otra denominación. A fin de cuentas arte, no se si con mayúsculas. Yo digo ARTE.
Como ARTE era lo que hacían los Titiriteros.
Me explico: Los que peinamos canas, los que hemos sobrepasado las sesenta primaveras con sus correspondientes inviernos; los que tuvimos la suerte, digo bien, suerte de nacer y vivir en un pueblo perdido de nuestra Castilla o León, sabemos de aquellos TITIRITEROS nómadas mas que ambulantes, que al son de su trompeta abollada, bombo remendado y platillos que sonaban a hojalata, removían las ENTRAÑAS del vecindario, principalmente de la chiquillería, recorriendo las calles del pueblo, pregonando la función de la noche en la plaza del pueblo.
Llegada la noche, todo el mundo se concentraba en la plaza, desde el abuelo mas viejo al niño en pañales en el regazo de su madre, para ver el espectáculo de la Cabra, pero también eran Funambulistas, Trapecistas, Ilusionistas. Todo en el mismo lote, 3 horas de espectáculo por el módico precio de "pasar la gorra". Al terminar, en agradecimiento porque esa noche podrían cenar y posiblemente comer al siguiente día, de regalo organizaban una o dos horas de baile, berbena, (¿ahora lo llaman conciertos?

Resumo. Para mi, eso era también ARTE y también me removían las entrañas, sobre todo observando como las heladas noches de invierno cobijaban sus residenciales carromatos o tartanas que no consumían gasóleo (los mas avispados ya habrán deducido que eran de tracción animal), cuando no eran unas raidas y muy ventiladas digamos tiendas de campaña.

No se, a lo mejor no tiene nada que ver con el tema, pero a mi me apetece dejar una mi humilde opinión.